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La digitalización del periodismo: El ciberperiodismo como una nueva demanda de caracter formativo
Autor/-a: Humberto Orozco Cera
Colectivo Cartagena Piensa
Al igual que lo hicieron, en su momento, la radio y la televisión, el ciberperiodismo ha tomado de la prensa clásica características primordiales, ya sea desde el punto de vista de la redacción de contenidos o desde la clasificación de sus géneros. Sin embargo, los cibermedios han comenzado a estructurar una nueva forma de hacer periodismo por medio del aprovechamiento de las plataformas digitales, o por medio de la estructuración de un lenguaje propio (multimedialidad, hipertextualidad e interactividad) que permite conectar, gracias a la plataforma tecnológica, a las partes del proceso comunicativo. Por todo lo anterior, los periodistas reclaman formación para enfrentarse adecuadamente a los retos comunicativos que plantea el ciberperiodismo.
Hoy, el periodista ha de ser capaz de comprender el alcance de esta nueva forma de hacer periodismo y, por ende, ha de adquirir, con la práctica, nuevas competencias, habilidades y destrezas que le ayudarán en su quehacer profesional.
Las nuevas demandas de carácter formativo plantean un reto en el ámbito de lo práctico y lo académico. La práctica es un hecho que se realiza a diario por la mayoría de los estudiosos y profesionales del periodismo, quienes confluyen con y en la Red y, se comunican por medio de las herramientas que esta brinda. Irónicamente, ha sido la Universidad quien se ha quedado rezagada en esta labor; si la revolución del ciberperiodismo exige una serie de transformaciones y un viraje en el planteamiento de los estudios de Comunicación Social y Periodismo, debería ser la Universidad la más comprometida con esta dinámica.
1-Las Barreras del Ciberperiodismo .
En la década de los noventa, la aparición de diferentes medios de comunicación desde y para la Internet planteó el reto de transformar las rutinas de producción del periodismo, desde los talleres de impresión a sus redacciones y adaptarlos a las denominadas Nuevas Tecnologías. Se hacía necesario que la prensa, gracias a la correcta utilización de las nuevas herramientas tecnológicas, alcanzara una difusión mundial, sin abandonar la calidad y la especialización de sus contenidos.
En realidad, los medios han ido dotándose de una ciberestructura y los cambios en cuanto a la organización, las rutinas de producción, el lenguaje, y el personal laboral y profesional han sido notorios y acordes a las exigencias de la Internet. Sin embrago, todo esto ha echado a un lado un punto de suprema importancia, la transformación de los planes de estudio de Comunicación y Periodismo y la adaptación de estos a la realidad mediática y profesional.
Una investigación realizada en abril de 2004 por el diario el Tiempo de Bogotá, sobre el trabajo en las redacciones de los periódicos digitales arrojó resultados que dejan mucho que desear acerca de la preparación que poseen quienes se encargan de las ediciones digitales de estos medios. La encuesta determinó que la mayoría de los periodistas on line que trabajan en los medios latinoamericanos tienen entre 20 y 30 años de edad y que, de estos, un 53% no posee formación académica en periodismo digital. Además, casi la mitad, el 49%, de los periodistas de las ediciones digitales ganan mucho menos que los periodistas de las ediciones en papel, mientras que el 51% restante tan solo alcanza a igualar los ingresos de estos. Por otra parte, el 70% de los encuestados afirmó que su mayor necesidad en términos de capacitación se centra en la creación de productos multimedia, y en segundo grado, cómo escribir para Internet. La mayoría de las empresas que emplean a estos periodistas aseguran que los ingresos que generan sus páginas on line no les alcanza para mantener su operación, por lo que se han planteado en algún momento cobrar por sus contenidos.
Tal y como señala Bella Palomo, de la Universidad de Málaga, España: “La mayoría de las empresas se muestran reticentes a la hora de invertir en la formación y reestructuración de sus plantillas que supondría dar por bueno el reto que plantea el Periodismo en línea. Ello es motivo de crítica por parte de los profesionales. En España, por ejemplo, donde la práctica totalidad de los diarios se encuentran en la red, sólo la mitad de los periodistas reconocen tener correo electrónico en la redacción, si bien la mayoría asegura el uso frecuente de Internet para el ejercicio de su trabajo”.
Queda claro que las facultades de Comunicación y Periodismo deben contemplar la necesidad de dotar a los estudiantes de las competencias necesarias para desenvolverse de manera eficaz en el campo del periodismo on-line. Para ello, la inclusión de materias que profundicen en las características, las rutinas de producción y otros aspectos de esta nueva forma de periodismo constituye un punto fundamental. Esto sin dejar de lado la Empresa Ciberperiodística, teniendo en cuenta que el ciberperiodismo se presenta como un ámbito laboral en alza.
La investigadora Virginia Luzón al respecto apunta:”Es un hecho que sin la aplicación de las nuevas tecnologías de la comunicación el trabajo será más lento y posiblemente menos elaborado. Y además, se suma el agravante de que más de la mitad de las actuales ofertas de trabajo para el periodista provienen de medios digitales, donde saber aplicar correctamente los criterios de utilización de las nuevas tecnologías es imprescindible. Por ello, en el ámbito laboral podemos diferenciar entre aquellos periodistas formados y capacitados para trabajar con las nuevas tecnologías y aquellos cuya formación ha quedado anticuada, al ser anterior a la implantación de las nuevas tecnologías”.
La tarea parece tan clara como concreta. Sin embargo, un “diagnóstico” del estado actual de la enseñanza del ciberperiodismo en las facultades de Comunicación y Periodismo colombianas podría evidenciar que en el proceso de inclusión curricular del periodismo on-line existen aún muchos obstáculos.
2-El estado actual. La digitalización del periodismo.
El estado actual de la enseñanza de la Comunicación y el Periodismo en las universidades colombianas se caracteriza por presentar una muy mínima inclusión del ciberperiodismo en los planes de estudios tanto desde una perspectiva cuantitativa global, en contraste con el número total de materias ofertadas, como desde un enfoque centrado en las diferentes “expresiones” del periodismo, es decir, si se compara este, por ejemplo, con las asignaturas sobre prensa impresa, televisión o radio. Por tanto, teorizar acerca de su implementación en Colombia es brindar un aporte a las Facultades y Escuelas de Comunicación y Periodismo, pues hasta la fecha, ninguna de ellas cuenta con académicos que hayan desarrollado modelos estructurales en la materia. Además si se hace una revisión global a los planes de estudio, en América Latina, específicamente del área de periodismo se encontrará la casi ausencia de las asignaturas vinculadas a las TICs y más aún del ciberperiodismo .
Por otra parte, el urgente desarrollo de las asignaturas relacionadas con el ciberperiodismo necesita contar con materiales bibliográficos que las respalden. Y, hoy por hoy, esos materiales apenas existen; no ya sólo en la Universidad hispana, sino en cualquier parte del mundo. Ramón Salaverría y Javier Díaz Noci, coordinadores del Manual de Redacción Ciberperiodística, afirman: Los periodistas reclaman formación para enfrentarse adecuadamente a los retos comunicativos que plantea el ciberperiodismo. En un periodo de profunda transformación los periodistas se muestran desorientados y recelosos ante una nueva disciplina cuyas claves y características ignoran. Esta desorientación y recelo les ha llevado a adoptar con frecuencia planteamientos tecnófobos, caracterizados por renegar de toda innovación y por la tendencia a perpetuar de manera acrítica rutinas de antaño”.
La docente e investigadora de la Universidad de Málaga, María Ángeles Cabrera reflexiona sobre el rol que ha de asumir la denominada prensa digital o electrónica en el marco del actual sistema de medios:
“La prensa en su continua y dinámica adaptación tecnológica ha evolucionado desde antes de la aparición de Internet, por lo que su transformación actual no es más que un paso más en su constante modificación de códigos y de lenguajes — tipografía, diseño, color, grafismos, etc. De hecho, los nuevos valores visuales de la prensa han sido determinantes, en gran medida, en la creación de la imagen del primer Internet, el que conocemos hoy y el que evolucionará, con seguridad, en los próximos años hacia soluciones más acordes con las posibilidades y la evolución del soporte digital. No obstante, si en relación con el aspecto visual, se puede afirmar que la experiencia del diseño en prensa ha inspirado y sigue inspirando los criterios visuales de la prensa en el nuevo medio, nos encontramos con otra cuestión pendiente de resolver en relación con los contenidos.
En este sentido, la prensa ha salido al paso ofreciendo a Internet, y así lo sigue haciendo en la mayoría de casos, los mismos contenidos que trabaja para su versión impresa. Sin embargo, el nuevo medio exige tanto al soporte papel como al digital, la búsqueda de contenidos propios y diferenciadores que contribuyan a la resolución de la crisis de identidad que, desde tiempo atrás, atraviesa la profesión”.
Todo lo anterior permite apreciar la necesidad urgente de incorporar cátedras vinculadas a los cibermedios y al ciberperiodismo. De lo contrario, la tendencia seguirá orientada por prácticas desarticuladas e inoperantes que lograrán emular otras experiencias, pero que desaprovecharán una oportunidad única para el campo de la comunicación: “la digitalización del periodismo”.
3-Los Objetivos de la Enseñanza del Ciberperiodismo.
La necesidad de dotar a los futuros periodistas de las habilidades necesarias para construir mensajes de naturaleza multimedia, interactiva e hipertextual, entre otras características, es una demanda planteada por un gran número de investigadores y expertos. En esta línea, Concha Edo apunta: “[...] el periodista que trabaja para cabeceras digitales tiene que interactuar con los lectores y pensar en multimedia, informar con textos, imágenes y sonido, aunque eso hoy produce, en la práctica, unas dificultades operativas que la tecnología y, como consecuencia, los medios, todavía no han podido resolver” . Estas afirmaciones dan clara cuenta de cuales podrían ser los objetivos de la enseñanza del ciberperiodismo, porque, aun sin la realización de los diagnósticos previos, se ven con facilidad las falencias estructurales que posee el sistema académico en cuanto a la enseñanza de materias y cátedras que respondan a la realidad social, evitando lo que Bella Palomo define, en el actual estado del ciberperiodismo, como la convivencia de periodistas de “dos velocidades” .
El análisis de todo lo planteado anteriormente permite señalar tres puntos como los de mayor importancia. Esta información puede ser de gran relevancia en el proceso de remodelación de los planes de estudio de Comunicación y Periodismo en las universidades colombianas. Los siguientes objetivos subrayan la pertinencia de combinar la reflexión teórica con la adquisición de habilidades de índole práctica.
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